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Repollo rehogado


El repollo es el tipo de col que más se consume en la península Ibérica y en la región de Extremadura. Se trata de una col redonda, de hojas prietas y color verde pálido, que se vuelve blanca en el tronco. El repollo es un alimento humilde, que no ha faltado nunca en la cocinas extremeñas durante los meses más fríos de invierno. Hoy es una comida olvidada y menospreciada, “viejuna” que diría alguno. Sin embargo se trata de un “súperalimento” que deberíamos incorporar a menudo en nuestros menús, ya que es bajo en grasas y rico en fibras, ayudándonos a reducir el colesterol y con propiedades antioxidantes que retrasan los signos del envejecimiento.

Esta receta de repollo rehogado intenta reproducir la manera como lo preparaba mi abuela. Conseguía que el repollo adquiriese una textura suave, algo crujiente, con un ligero sabor a ajo y aceite de oliva. A pesar de tratarse de una comida de una gran simpleza, conseguir un resultado como el de ella no es fácil y requiere bastante tiempo y mimo. Sin embargo ya veréis que merece la pena. Esta comida es ideal tanto para acompañar un cocido como unos trozos de panceta.

Medio repollo

4 ó 5 dientes de ajo

Pimentón (opcional)

Aceite

1. Lo primero que haremos es picar muy fina la col y la lavamos bien bajo el grifo con agua. La ponemos a cocer en una olla con agua fría, durante unos 30-40 minutos. Una vez cocida, la escurrimos y reservamos.

2. En una sartén calentamos abundante aceite y cuando este en su punto (no muy caliente) echamos los dientes de ajo que habremos laminado más o menos fino (sin pasarnos).

3. Sin dejar que el ajo se dore demasiado añadimos la col cocida. El fuego tiene que estar a potencia media.

4. Rehogamos la col, removiendo poco a poco y picándola un poco con la cuchara de madera. El proceso llevará tiempo, por lo menos una hora: la col tiene que haber reducido más de la mitad su volumen ya que la mayor parte del agua se habrá evaporado y se deshará, tostándose un poco y dándole ese toque crujiente y caramelizado.

5. Antes de retirarla del fuego se puede añadir una cucharadita de pimentón si nos gusta.

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